Marie Lu regresa a librerías chilenas con Rebel, la esperada cuarta parte de Legend bajo el sello Puck de Ediciones Urano, con la historia de Eden y Day. Un libro que pretende responder preguntas que quedaron pendientes en el final de la entonces trilogía y que nos regresa a este mundo distópico con un nuevo villano, un nuevo enfrentamiento y viejos conocidos.
El mundo se mueve, se inclina, a veces se derrumba. Pero, a veces, se inclina hacia ti y toda va bien.
2011. Marie Lu comenzaba a volverse más famosa tras la publicación de Legend, la primera parte de la trilogía que tendría el mismo nombre y que nos llevaría a un Estados Unidos distópico llamado la República donde la corrupción y las desigualdades marcaban la sociedad. En ese contexto, conocimos a June y a Day, dos jóvenes que cambiaron lo que hasta ese momento se conocía.
La historia que culminó en Champion, regresó el año pasado con la cuarta entrega de la -ahora- saga con Rebel, un libro que se concentra en la historia de Day y Eden, el hermano menor de éste, retomando diez años después del final de Champion. Si bien el libro podría ser leído de forma independiente de la trilogía de Legend ante el salto temporal, es recomendable leer la trilogía en orden, ya que contiene muchos spoilers de los libros anteriores.
El argumento de Rebel gira en torno a Eden, quien pese a su inteligencia y talento siempre se ha sentido como la sombra de su hermano mayor, quien es un agente del servicio de inteligencia en la Antártica. Sin embargo, las capacidades de Eden traerán la atención de Dominic Hann, quien pretende derrocar el gobierno y pese a que Day advierte e intenta proteger a su hermano, Eden quiere tener el reconocimiento que siempre ha querido y ser su propia persona.
Si bien la evolución en la pluma de la autora se percibe cuando leemos la historia, los personajes carecen de la fuerza que se sentía en la trilogía principal. Especialmente, la relación entre Eden y Day deja algunos temas sin tocar y que podrían haber resultado mucho mejor para la trama.
El libro hace muchas referencias a la saga anterior, de allí la recomendación a leerlos en orden, sin embargo, ese no es el único “pero” que podemos hallar en el libro, ya que el villano de esta historia se siente demasiado plano y conveniente para la trama. Incluso, la resolución resulta conveniente para la trama, y de cierta manera termina siendo una versión simplificada de lo que fueron los libros anteriores con uno o dos giros.
No obstante, Marie Lu consigue una atmósfera bien definida, pues logra generar un escenario propio para la historia que describe en Rebel, nos explica cómo funciona el lugar donde viven nuestros protagonistas y nos hace comprender por qué Eden se siente tan subvalorado que pese a algunas conductas un tanto caprichosas, de igual forma consigue que podamos comprenderle.
Como en toda historia, el ritmo del libro es paulatino, primero explorando y describiendo este nuevo contexto y luego Marie Lu consigue realizar un punto de inflexión que acelerará el desarrollo de un libro para encaminarse a un final que muchos querían leer. De alguna forma, Rebel se siente como un tributo y una novela especial para quienes han seguido a la autora desde que comenzó la historia en Legend.
Me encuentro preguntándome si alguna vez en la historia hubo paz, si podemos alguna vez encontrar la manera de escapar de ciclo de destrucción que creamos nosotros mismos. Si existe, desde luego yo no la he visto
Rebel funciona como la cuarta parte de la saga o como un spin-off autoconclusivo de una trilogía que en su momento fue un éxito de ventas y que regresa para darle a sus fans un cierre que todos estaban esperando. Sin embargo, la historia resulta débil con personajes que no logran generar una conexión al cien por ciento con los lectores, pero que se sustenta con un ambiente bien desarrollado y al más puro estilo de Marie Lu.