No había nadie en el mundo más emocionado por esta película que yo. Amo las películas nominadas a múltiples premios como “La Favorita”, “Roma” o “Cold War”, pero les mentiría si dijera que no vivo por películas de acción de bajo presupuesto como esta. Con el protagonista y el tono correcto, estas películas pueden llegar a ser increíblemente encantadoras y satisfactorias y en el peor de los casos, tan ridículas que al menos sirven para reírse un rato. Lamentablemente no puedo decir ninguna de estas cosas sobre “Atentado en el Estadio”.
A diferencia del tráiler, creo que el peor pecado de “Atentado en el Estadio”, aparte de la rima de su título, es que se toma tan en serio que es imposible disfrutarla cuando se pone progresivamente ridícula. Tiene más en común con las típicas películas de venganza para papás como “Taken 2” que con la explosiva acción sin sentido de una película Cannon Films por ejemplo. Sin mencionar, que tiene toda esa acción suave y sangre digital poco satisfactoria de una película PG-13.
Uno de los elementos que más esperaba ver era a Dave Bautista liderar una película por su cuenta, pero esta totalmente desperdiciado en este film. No utilizan ni su capacidad para generar comedia, ni sus habilidades actorales o su imponente físico efectivamente. Podrías reemplazarlo por Bruce Willis, Gerard Butler o Liam Neeson y no mucho cambiaría. Me sorprendió mucho verlo de productor en los créditos. Creo que otro director podría haberle sacado mucho más partido a Bautista, quien está atrapado en el clásico papel de “Ex-marine rudo”.
El guion es otro de esos “Die Hard en X locación”, en este caso un estadio. Los villanos son sorprendentemente similares a los de Skyscraper de hecho, calcando lo de la chica ruda que le dispara a todos. El plan y objetivo que tienen es tan poco efectivo que no sorprende ver como Dave Bautista lo va arruinando poco a poco. Pero creo que lo peor en cuanto a personajes: son la sobrina de Bautista y su amigo guardia del estadio. La primera solo toma decisiones que la ponen en riesgo para que el protagonista tenga algo personal que rescatar, y el segundo es el “comic relief” más desagradable y obvio que he visto en años. No sé porque escogieron a la persona con la voz más desagradable del mundo para ser el personaje graciosillo de esta película, pero claramente no funcionó.
Desearía decir que “Atentado en el Estadio” es una inofensiva película de acción terrible, pero su ejecución es lo suficientemente floja y genérica como para enojarme un poquito. Si quieren pagar para ver a Pierce Brosnan completamente confundido sin tener ninguna idea de lo que pasa a su alrededor (lejos el elemento más divertido de la película) por favor pasen adelante, pero que será un “no gracias” para mí en esta ocasión. Se pasa rápido al menos y hay una persecución en motocicletas donde casi sentí emoción, algo es algo. Ubicaré a “Atentado en el Estadio” en el lugar número 108 de las 138 películas de 2018 que he visto, arriba de “Johnny English Strikes Again” y debajo de “Rampage”.