Cuánto se agradece cuando una empresa como Ripley pone su atención en un público como los gamers y cuanto más se agradece cuando lo hace con un evento como el del pasado martes 23 de Mayo.
Aún me acuerdo cuando era pequeño, provinciano e inocente, y con mis papas viajamos a la capital y solo pedimos ir al local de Ripley en Parque Arauco porque su primer subsuelo era exclusivo infantil y en medio, ocupando un espacio importante estaba la zona de videojuegos donde podamos probar los últimos títulos en las consolas de forma directa. Con el paso del tiempo esto se ha perdido, los videojuegos ocupan espacios con menos
gamers no solo vamos a poder ir y encontrar un espacio donde nos sintamos a gustos, pero una nueva dimensión de ver el escenario de venta en un sector más inclusivo donde cada lugar sea también el escenario de campeonatos y competencias.
En el evento, precedido por Cristóbal Millán, llevado a cabo en el retobar Insert Coin, se nos atendió a los diferentes gamers de cuerpo y alma como si fuéramos parte de una realeza, sin importar si somos profesionales o casuales, sin ver que consola jugábamos. Se nos trato como lo que somos, un sector importante de sus ventas. Algunos podrían tomarlo mal, podrían decir que es para generar publicidad, decir que fue un acto populista para la prensa, yo digo que nos dieron el mismo trato que nos van a dar a todos como gamers en sus locales y que cada vez que pasemos por las zonas Gaming House de Ripley vamos a sentir que estamos en un evento de Gamers, viendo jugadores competir, visualizando los juegos y viviendo una experiencia de compra que nos deja además un buen rato, una verdadera experiencia valerosa.