Algo atrasado, lo sé, el fin de año fue de locos, pero por fin podré darme un tiempo y hablar de este juego que, dentro de todo, ha sido muy aclamado y criticado. Este tipo de casos son extremadamente interesantes a revisar y eso trataremos de hacer hoy. Hablemos entonces de Boy Band Simulator XV, Noctis y sus amigos 15, o como quieran llamarlo.
FFXV es un JRPG de la clásica empresa de este tipo de juegos, Squaresoft, que dentro de lo que podríamos llamar una rebeldía absoluta quiso revolucionar el concepto prescrito de Final Fantasy que ya tenemos muy grabado en la cabeza. La razón de esto se debe al estilo más ambientado en la acción y tiempo real en los combates y a la naturaleza de mundo abierto que propone FFXV y que ningún otro FF, salvo XI y XIV que son MMORPG, había intentado. La trama de FFXV gira en torno al heredero del reino de Lucis, Noctis Lucis Caelum, quien junto a su equipo de guardaespaldas compuesto por Gladiolus (el valiente y fortachón), Ignis (el inteligente y británico) y Prompto (literalmente el huevón) deben escoltar a Noctis al reino de Altissia donde contraerá matrimonio con la Oráculo, la bella Lunafreya Nox Fleuret. Y claramente no puedo decir más porque como todo juego de rol, la trama lo es todo, pero al menos esa es la sinopsis. Eso sí, conforme el juego de desarrolla, claramente hay una serie de eventos que irán dándole más forma a la relación que tiene Noctis con sus otros amigos, pero a diferencia de muchos otros FF, FFXV se centra casi exclusivamente en Noctis, o sea son contados con los dedos de una mano los cutscenes que cortan a eventos que ocurren en otros lados, fuera del alcance de Noctis. Este estilo es sumamente interesante dado que le ayuda al jugador ponerse exactamente en la posición de Noctis cuando realmente no tiene ni la más puta idea de lo que sucede. Por otro lado, también puede resultar molesto dado que hay muchos elementos de la trama que no se explican bien, y hay que sacar propias conclusiones e interpretaciones. Dentro de todo, este juego ofrece una trama algo plana, pero este formato de punto de vista le agrega un elemento más “intrigante” y siempre uno tiene ganas de saber más y explorar que cresta está pasando.
Por otra parte, algo que siempre ha sido tema de investigación en todos los FF es como se lleva a cabo la acción y el crecimiento de los personajes. Respecto al primero, como lo había mencionado antes, el combate es en tiempo real. Controlando a Noctis, tu puedes saltar, golpear con alguna de las 4 armas que tienes equipadas, utilizar alguna habilidad especial de tus compañeros, esquivar o parrear ataques y finalmente teletransportarte. Si bien, suena como un juego hack and slash (al más puro estilo de God of War), la verdad es que el combate luego de un rato aburre: para golpear dejas apretado el botón O (PS4) y Noctis hará un combo con el arma que desees. Si cambias la dirección de la palanca, podrás por ejemplo golpear y alejarte del enemigo, o bien tirarte de cabeza contra él. Apretando otro botón, Noctis automáticamente esquivará golpes (hasta que se te acabe el mana). No es que estés constantemente apretando botones, sino que usualmente estás o apretando uno u el otro. En peleas más estresantes, estarás constantemente utilizando pociones: no hay magia de curación salvo una habilidad de Ignis, y siempre tendrás que estar transportando un arsenal de pociones y es que el combate en este juego funciona de manera distinta: tu HP puede ser recuperado usando pociones, pero si llegas a 0, tu HP máximo empieza a caer, y la poción sólo recupera desde 0 hasta el HP que quedó como tu nuevo máximo. Para recuperar el límite como tal, debes usar elixires, por tanto tienes que usar constantemente ambos tipos de items. El otro problema es que la mayoría de las peleas son con enemigos que de un mangazo te dejan con HP 0, y tus compañeros son unos malditos lemmings… El spameo de pociones es ridículo en ciertas ocasiones, especialmente en los dungeons y jefes, que destruyen totalmente el flujo de acción en tiempo real que tiene el juego.
Respecto al crecimiento de tus personajes, acá también hay una especie de innovación. Conforme completas quests y matas enemigos, vas acumulando puntos de experiencia (XP), pero no los vas adquiriendo per se, pues debes ir a una posada, hotel o bien acampar para realmente ganarlos. Y ojo, donde lo hagas tiene mucho que ver con la cantidad ganada: entre más caro sea el lugar, ganas un multiplicador de XP que puede aumentar de gran manera la cantidad ganada. Acampando te da 1.0, una casa rodante te da 1.2, un hotel “piola” 1.5, uno caro 2.0 y el hotel exclusivo puede darte 3.0, por tanto es cosa de juntar una buena cantidad de XP y dinero (que no es difícil) y ver aumentar tu nivel de manera descarada. Por otro lado tienes tus puntos de habilidad (AP) que ganas dependiendo de tu desempeño en los combates y cada vez que subes de nivel, y estos AP’s los puedes gastar en mejoras a Noctis y compañía: ya sea aumentar fuerza, stamina, defensas, ganar habilidades nuevas, mejorar la ganancia de XP y AP, etc. Finalmente, la comida también es algo importante: si acampas o bien vas a un restaurante, puedes optar por preparar o comprar una merienda que otorgará habilidades pasivas como HP, daño, +% de XP o AP, mejor recuperación de HP, etc. Especialmente útil cuando te vas a tirar contra jefes complicados o taclear un dungeon de alto nivel: estas comida pueden ser la gran diferencia entre un combate de 2 minutos o 10.
En lo referente al audio y video, nada que decir: el engine funciona demasiado bien. Excelente gráfica que además no tiene muchos problemas de framerate y la música fue compuesta por la increíble Yoko Shimomura (Parasite Eve, Kingdom Hearts, Xenoblade Chronicles), y es que la música es un elemento realmente importante en todo FF y aquí no decepcionó en lo más mínimo. Es probablemente uno de los mejores OST de un juego que he escuchado en mucho tiempo.
FFXV tiene una GRAN lista de problemas… Entre una trama plana que cuesta seguirla algunas veces, o un combate que usualmente se resume en aguantar con hartas pociones hasta lograr pelearle al enemigo, es un juego que deja muchas sensaciones mezcladas. Como que quieres que no te guste por lo aburrido que se torna en algunos pasajes, pero aun así logra re-atraparte. Gran parte del juego realmente ocurre después de pasártelo: hay una de serie de dungeons escondidos, e incluso, puedes optar por una versión “heroica” de los dungeons que ya hiciste donde caen mejores armas. Pero, el problema es muchos de estos dungeons tiene una rara nivelación respecto al nivel de tus personajes recomendado, y volvemos al problema anterior: estoy constantemente tragando pociones porque un sólo golpe inevitable me deja con HP nulo, y las 99 pociones y 99 elixires que llevo se han hecho poco. Otro SERIO problema es que muchas veces, debido a que la cámara tiene un grave problema existencial, muchas veces te pierdes en la misma acción, especialmente cuando estás peleando en espacios reducidos, mostrando la inexperiencia de Squaresoft en juegos de acción de este estilo (lo cuál es raro, ya han lanzado un par en el pasado, pero no aprendieron un carajo…). Finalmente, un error que ha sido algo recurrente en los juegos de Square, y es que la trama principal, en sí misma, es muy “blanda”, con poca trascendencia y nunca sentí las ganas de seguir viendo que pasa después.
FFXV tiene potencial, sí, y muchas veces logra llevar bien el ritmo de juego, pero también tiene muchos problemas respecto a que mierda quiere ser como juego en sí: parece un JRPG normal, pero a veces parece más un MMORPG , por como los dungeons funcionan, el estilo de pelea y la cantidad de quests secundarias que hay. De todas maneras, encuentro que es un experimento interesante, y dado los videos de lo que será FFVII remake, parece que es la dirección que desean tomar. De todos modos, Squaresoft ha anunciado una seguidilla de actualizaciones y paquetes de mejoras al juego en sí, así que parece que tenemos harto más FFXV por este año, muy al estilo Witcher (y veremos si la calidad de estos contenidos valen la pena).